La rivalidad entre Roma y Cartago por controlar el Mediterráneo occidental se plasmó en las tres Guerras Púnicas que disputaron ambas potencias entre los años 264 a.C. y 146 a.C. y que terminaron con victoria romana. Sin embargo, no era la primera vez que los cartagineses recurrían a las armas para disputar el dominio del mar; antes lo habían estado haciendo ya desde el año 600 a.C. sólo que contra otro enemigo: las polis de la Magna Grecia, de ahí que aquellas contiendas -curiosamente también fueron tres-…