Esta receta de pollo con guindilla y limón es muy fácil de hacer y tiene un sabor fresco y picante. Para hacerla, se corta el pollo en trozos y se saltea con cebolla, ajo y guindilla. Luego se agrega una salsa hecha con jugo de limón, salsa de soja, azúcar y maicena. Se cocina todo junto hasta que la salsa espese y el pollo esté bien cocido. Se sirve caliente con arroz blanco y ensalada de lechuga y tomate.