Comience su primer día en San Petersburgo visitando el famoso Museo del Hermitage, uno de los museos más grandes y antiguos del mundo. Después, diríjase a la majestuosa Catedral de San Isaac, una de las iglesias más grandes del mundo y un ejemplo impresionante de la arquitectura rusa. Disfrute de las vistas panorámicas de la ciudad desde la cúpula de la catedral.