Las cajas de cartón son un elemento muy versátil a la hora de hacer juguetes o disfraces para los niños. En este caso, podemos guardar una caja grande para hacer una caracterización de la casa del terror. Necesitaremos un cúter, un poco de goma Eva y elementos reciclados que te encuentres en casa, como la espuma de algún paquete de venta por correo que te haya llegado las últimas semanas. No solo es un disfraz rápido y económico, esta casa se convertirá en una divertida propuesta para hacer manualidades con los niños.