El ajo es un ingrediente popular en la cocina italiana y se puede usar para darle un sabor intenso a la focaccia. En esta variación, se agrega ajo picado a la masa antes de hornear. El resultado es una focaccia con un sabor intenso y aromático que combina perfectamente con la cebolla y las anchoas. Esta focaccia es perfecta para servir como aperitivo o como acompañamiento de una cena italiana.