Esta casa cueva es una opción única para alojarse en Granada. Se encuentra en plena naturaleza, en una zona tranquila y con vistas espectaculares. Dispone de todas las comodidades necesarias, como cocina equipada, baño completo, salón con chimenea y terraza. Además, su temperatura constante de 18 grados la convierte en un alojamiento fresco en verano y cálido en invierno.