Esta pizza es una opción saludable y deliciosa para disfrutar en casa. La rúcula es una hoja verde rica en nutrientes como vitamina C, calcio y hierro, mientras que los tomates secos aportan un sabor intenso y una textura crujiente. La mozzarella bufala es un queso bajo en grasas saturadas y alto en proteínas, y el parmesano le da un toque de sabor extra. Para la masa, se puede utilizar harina integral y agregar semillas de chía o lino para aumentar el contenido de fibra. Para el toque final, se agrega un chorrito de vinagre balsámico, que no solo le da un sabor agridulce, sino que también ayuda a reducir el índice glucémico de la pizza.