El Café Ebel es uno de los cafés más antiguos de Praga. Fundado en 1857, ha sido visitado por personalidades como el compositor Antonín Dvořák y el escritor Jaroslav Hašek. Ofrece una amplia variedad de bebidas y comidas, y su ambiente clásico y acogedor lo convierte en un lugar ideal para disfrutar de un café o una comida tranquila.