Una opción fresca y sabrosa es combinar la escalivada con queso feta. Después de asar las verduras, se desmenuza queso feta sobre ellas y se sirven. El queso feta aporta un sabor salado y un toque ácido que contrasta muy bien con las verduras asadas. Esta versión de la escalivada es ideal como ensalada o como guarnición refrescante.