La coca de recapte tradicional es una receta típica de la cocina catalana. Consiste en una base de masa de pan crujiente, cubierta con verduras asadas como pimientos, berenjenas y cebollas, y embutidos como longaniza o butifarra. Se hornea hasta que la masa esté dorada y crujiente, y se sirve como aperitivo o plato principal. Es una receta perfecta para sorprender a tus invitados con los sabores auténticos de la cocina catalana.