Esta receta es una versión innovadora de la clásica sopa italiana de stracciatella. En lugar de utilizar huevo y queso para hacer los hilos de stracciatella, se utiliza calabacín rallado. Para prepararla, se saltean cebolla y ajo en una cacerola con aceite de oliva. Luego, se agrega calabacín rallado y se cocina hasta que esté tierno. Se añade caldo de pollo y se deja cocinar a fuego lento durante unos minutos. Finalmente, se agrega queso parmesano rallado y se mezcla bien hasta que se derrita. Se sirve caliente.