El tiramisú de té de jazmín es una variante delicada y aromática del clásico postre italiano. Se prepara con capas de bizcochos de soletilla empapados en té de jazmín y una crema de mascarpone, huevos y azúcar. El resultado es un postre cremoso y suave, con un sabor floral y un toque de cacao en polvo por encima. Es perfecto para aquellos que buscan opciones más delicadas y para los amantes del té de jazmín.