Si prefieres maridar los calamares a la romana con vino, puedes optar por un vino blanco seco y fresco. El vino blanco combina muy bien con los sabores del mar y realza el sabor de los calamares rebozados. Puedes elegir un vino blanco joven y afrutado, como un Riesling o un Sauvignon Blanc, para disfrutar de una experiencia gastronómica completa. Sirve los calamares con una copa de vino blanco bien frío y disfruta de una combinación deliciosa.