Si te gusta el bacalao, puedes añadirlo al caldo gallego para darle un sabor único y delicioso. Puedes utilizar bacalao fresco o bacalao desalado, según tus preferencias. Cocina el bacalao por separado y añádelo al caldo justo antes de servir, para que conserve su sabor y textura. Esta versión del caldo gallego es perfecta para los amantes del pescado y para aquellos que quieran disfrutar de un plato lleno de sabor y tradición.