Extraordinaria proeza la de Bource para un filme que exige música por todas sus secuencias. Fabulosa composición que podría haber caído en la parodia o en lo ridículo y que sin embargo, logra homenajear a nombres tan importantes como Erich Wolfgang Korngold, Charles Chaplin, Max Steiner... Una auténtica pena que su director Michel Hazanavicius despreciase el final de Bource para utilizar una pieza importante de ‘Vertigo’ de Bernard Herrmann 😭😭