Si prefieres una opción más ligera, puedes servir tu Saltimbocca con una ensalada fresca. Una ensalada de rúcula con tomates cherry y queso parmesano es una excelente opción para acompañar el Saltimbocca. Simplemente mezcla los ingredientes en un tazón y adereza con aceite de oliva y vinagre balsámico.