Nikola Tesla hizo innumerables experimentos misteriosos, pero él en sí mismo era ya todo un misterio  Las mentes de casi todos los genios suelen caracterizarse por una cierta obsesión y Nikola Tesla no podía ser menos. De hecho, Tesla rodeaba los edificios tres veces antes de entrar en ellos, limpiaba sus platos con 18 servilletas y vivía en habitaciones de hotel numeradas con cifras divisibles por 3.