El pollo al ajillo es un plato clásico de la cocina española. En esta receta, el pollo se cocina lentamente en una salsa de ajos, aceite de oliva, vino blanco y especias. El resultado es un pollo tierno y jugoso con un sabor intenso y delicioso. Acompáñalo con patatas fritas o arroz blanco para disfrutar de una comida completa y sabrosa.