Si eres amante del queso, puedes agregarle un toque de cremosidad a tu caldo de Navidad. Puedes utilizar queso crema o queso rallado y agregarlo al caldo durante la cocción para que se derrita y se mezcle con los sabores. Esto le dará al caldo una textura suave y cremosa, y también añadirá un sabor delicioso. Puedes utilizar carne de res, pollo o cerdo junto con verduras como zanahorias, papas y cebolla, y agregar el queso para darle ese toque especial. El resultado será un caldo de Navidad con un sabor rico y reconfortante.