Los raviolis de trufa y setas son una delicia para los amantes de los sabores terrosos. La pasta fresca se rellena con una mezcla de setas, trufa y queso ricotta. La salsa de crema y vino blanco es el acompañamiento perfecto para estos raviolis, ya que su sabor suave y cremoso combina a la perfección con los sabores terrosos de la trufa y las setas. Para darle un toque extra de sabor, se puede añadir un poco de cebolla y ajo a la salsa.