Esta receta de tarta de frutas es una opción refrescante y deliciosa para los días calurosos de verano. La base de la tarta es una masa quebrada casera, que se rellena con una mezcla de frutas frescas y gelatina. La tarta se deja enfriar en la nevera hasta que la gelatina se solidifica, lo que le da una textura suave y cremosa. Sirve esta tarta con un poco de nata montada para un postre perfecto.