Si piensas en un gran chef repostero seguro que se te viene a la cabeza el maestro Pierre Hermé. En su momento consiguió impulsar internacionalmente con su trabajo a Laduree, pero en 2002 da el salto y funda su propia boutique, Pierre Hermé París. Su pastelería principal está situada en el 40 Boulevard Haussmann, pero también en la Rue Bonaparte, 72, encontramos otra de sus espectaculares boutiques. Alta pastelería de diseño, con el macaron como icono, por el que también se hacen grandes colas para su compra. Vale la pena esperar en ellas para probar su cake de naranja o su pastel Ispahan, con frambuesa y litchi, toda una tentación del «Picasso de la pastelería".