Juana I de Castilla llamada “Juana La Loca” fue reina de Castilla de 1504 a 1555. Casada con Felipe “El hermoso” fallecido a los 28 años el 25 de septiembre de 1506. (probablemente envenenado por su suegro.) Enloquecida por la muerte de su marido, la Reina Juana se lanzó en peregrinación con el cadáver de su esposo, en una marcha fúnebre que aterró a media Castilla. El espectral cortejo solo se movía de noche e iba secundado por el olor a putrefacto que desprendía un cadáver cada vez más descompuesto.