En ocasiones desconfiamos de nuestra seguridad, de situaciones que pensamos que nos pueden hacer daño y nos limitan meiorar en la escalada. En este sentido, está demostrado como el uso de elementos pasitos de seguridad, como es el caso del uso del casco, nos puede inducir una confianza más que real, un sentimiento de invulnerabilidad que nos ayude a continuar sin pensar en los riesgos que este deporte puede entrañar.