Si prefieres una versión más ligera del Saltimbocca a la Romana, puedes probar con esta receta de pollo. En lugar de ternera, se utilizan filetes de pechuga de pollo, que se rellenan con queso y jamón serrano y se cocinan en una sartén con aceite de oliva. El resultado es un plato sabroso y saludable que es perfecto para una cena entre semana.