Para preparar la masa de pizza casera, se necesitan los siguientes ingredientes: harina de trigo, agua, levadura fresca, sal y aceite de oliva. En un recipiente grande, se mezcla la harina con la levadura disuelta en agua tibia, la sal y el aceite de oliva. Se amasa la mezcla hasta obtener una masa suave y elástica, que se deja reposar durante una hora en un lugar cálido y cubierta con un paño húmedo. Después, se estira la masa con un rodillo y se coloca sobre una bandeja de horno previamente engrasada.