Como “manager” soy lamentable. No es falsa modestia, podéis preguntar a cualquier persona que me haya sufrido como jefe. Hacedlo en privado, en público ya sabéis que nadie dice la verdad, no vayamos a quedar mal. No pasa nada, no hay mejor cosa que asumir tus limitaciones y dejarte de gilipolleces de “superar tus miedos” o “dejar tu zona de confort”.