Transcurriendo el año 1798, Napoleón Bonaparte comandó una campaña militar dirigida hacia Egipto. Aunque todavía no era emperador de Francia, sí tenía grandes influencias. Junto con él, se encontraban grandes científicos además de muchos otros soldados, sabios y estudiosos. Después de culminar la guerra en Egipto, Bonaparte y su grupo se sintieron grandemente atraídos hacia los artefactos que estaban en este lugar. Estaban interesados en conocer sobre los papiros, las estatuas e incluso las momias. Envíos a toda Europa El interés de los europeos por el antiguo Egipto fue denominado como egiptomanía.