Este es uno de los platos que no debe faltar en un menú navideño, un entrante que te agradecerá tanto el estómago como el cuerpo. Un bisque es más una crema de marisco, típica de la cocina francesa, que seguro que has probado mil veces, pero nunca te has atrevido a preparar. Este se puede elaborar con diversos tipos de marisco, tiene muchas variantes: bogavantes, langostas, mejillones o langostinos. El bisque originalmente es un potaje de aves o cacería, fuertemente sazonado y especiado, algual se utilizo como fondo para otras preparaciones y al que el paso del tiempo fue adornando con ecrevisses o langostinos de río y que en la actualidad se han convertido en su ingrediente principal. Este espectacular plato, lo puedes acompañar con langostinos de decoración ensartados de tres en tres en brochetas, y con una copa de vino blanco muy frío.