El pato laqueado con miel y jengibre es una receta que combina la dulzura de la miel con el toque picante y aromático del jengibre. El pato se asa con una capa de glaseado de miel y jengibre, que le da un sabor delicioso y una piel crujiente. El jengibre le aporta un toque fresco y picante al pato, mientras que la miel le da un sabor dulce y caramelizado. Una combinación perfecta de sabores que te sorprenderá y deleitará tu paladar.