La república romana, antaño virtuosa y ejemplar (ése fue el tópico acuñado por los historiadores de la época, que miraban atrás con nostalgia), se estaba yendo de las manos.
Guarda lo que
quieras, crea listas y compártelas
con tus amigos.
Descárgate Klisst en un instante y empieza a guardar y compartir tus listas.
Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar tu experiencia en Klisst. Puedes consultar nuestra Política de Cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas el uso de
cookies. Puedes aceptar o configurar las cookies pulsando en los siguientes botones: