La cómica Nicole Byer y el pastelero Jacques Torres presentan un concurso de pastelería tan simple y absurdo como adictivo. Es todo cuestión de forma: los participantes (aficionados a la pastelería, aunque a veces no lo parezca) deben recrear con la máxima fidelidad posible una tarta o un dulce de arquitectura generalmente compleja. Los resultados son un disparate. Además de la versión original (del que hay dos grandes temporadas navideñas), se pueden chequear las adaptaciones mejicana, francesa, española y alemana. Disponible en Netflix.