Mata mua (Érase una vez) (Paul Gauguin-1892)

Mata mua (Érase una vez) (Paul Gauguin-1892)

Esta pintura que plasma el paisaje y la vida que Gauguin pretendía encontrarse al llegar a Tahití en 1891 donde fue en busca inspiración al margen de la civilización occidental. Para recalcar ese pasado glorioso ya perdido el pintor utiliza colores planos y elementos que se reciclan en otras de sus obras como el árbol de copa amarilla o el paisaje del fondo. Gauguin intentó vender el lienzo en una subasta para pagarse su segundo viaje a Oceanía en 1895, pero no encontró comprador (Sala L1).