Saturno asombra tanto por su gigantesco tamaño (es el segundo planeta más grande del Sistema Solar) como por su sistema de anillos, sus auroras en ambos polos y su misterioso hexágono que persiste en el polo norte. El hexágono mágico mide unos 30.000 kilómetros de ancho, muta de color con el cambio de las estaciones y gira en sentido antihorario, en la misma dirección que el monstruoso huracán situado en el centro; el polo sur de Saturno también presenta un vórtice, pero no un hexágono a su alrededor.