Un dulce muy típico de Andalucía similar a las rosquillas fritas gallegas, aunque me consta que se preparan durante todo el año, sobre todo cuando hay alguna celebración en casa. Junto a las torrijas y los pestiños, podemos decir que forman parte de un triunvirato de postres de sartén. Al ser tan populares las variaciones de la misma receta son incontables, cambiando detalles según cada zona o cada casa.